Antiquísimo y, al mismo tiempo, eternamente joven; mecánico en su disposición, y, sin embargo, eficaz solamente por obra de la fantasía; limitado en el espacio, geométricamente fijo y a la vez ilimitado en sus combinaciones; en perpetuo desarrollo, y no obstante estéril; un pensamiento que no conduce a nada; una matemática que nada soluciona; un arte sin obras; una arquitectura sin sustancia, y, a pesar de todo, evidentemente más duradero en su esencia y existencia que todos los libros y obras de arte; el único juego que pertenece a todos los pueblos y a todas las épocas, y del que nadie sabe qué dios lo legó a la Tierra para matar el hastío, aguzar los sentidos y poner en tensión el alma.
Una partida de ajedrez celebrada durante un viaje enfrentamiento entre Mirko Czentovic, el zafio, iletrado y ambicioso campeón húngaro del mundo de ajedrez, y el Dr. B., un abogado vienés, víctima de la crueldad nazi tras la invasión de Austria por Alemania.
Una novela extraordinaria, una fábula del combate entre el bien y el mal, una contienda feroz entre la barbarie y el humanismo europeo amenazado. Una imprescindible obra maestra de Stefan Zweig, el autor en alemán más leído de todos los tiempos.