Alejandro Duque Amusco, sevillano afincado en Barcelona. Desde su primer libro de poemas mostró predilección por la expresión depurada y sensorial. Galardonado con el Premio Internacional de Poesía Alfonso Gatto, Duque Amusco considera que el primer objetivo al escribir es ahondar en nuestro espíritu, cerrar heridas, aplacar obsesiones y de ese modo, obtener una liberación interior.