Como buenos héroes, aunque incomprendidos, Pancho, Teban y Joseque deben cumplir una misión. Tras cinco meses de sequía, en los pueblos de su comarca han sacado a sus santos para convocar la lluvia. Aunque si el cielo atiende tantas súplicas, el diluvio será imparable. Convencidos de tal catástrofe, se empeñarán en salvar, como Noé, una pareja de animales de cada especie, pues de ellos depende la supervivencia de los animales del mundo.