Esta novela nos habla de una chica que sueña con una vida mejor y que sabe que solo hay una vía, cruda y pragmática: el ascenso social. Este Lazarillo moderno comienza su andadura en una fábrica de juguetes en Ibi, Alicante. Allí es la protegida del jefe y además trabaja junto a su madre, una comunista militante que ha desfalcado a la empresa y que debe huir para que no la encarcelen. Josefina debe elegir entre su madre o sus sueños en la fábrica, y elige lo segundo. Esta es la primera vez que debe hacer sacrificios para sobrevivir en un mundo hostil, pero no será la última. La andadura de Josefina la lleva por todos los rincones la geografía española y elaborando un retrato descarnado de los últimos cuarenta años de nuestro país, a todas luces imperfecto.