Tom Sawyer siempre se sale con las suyas: lo encontramos en el río cuando debería estar en el colegio, tirado a la bartola en vez de pintando la valla... ¡Las normas de los adultos no van con él!
Tom Sawyer es un muchacho travieso y astuto, que consigue siempre salir airoso de sus a menudo arriesgadas aventuras. En cada capítulo del libro aguardan situaciones sorprendentes y divertidas, como aquella en la que engaña a su querida tía Polly y se escapa del colegio para ir a bañarse al río, el día en que conoce a Becky, se enamora de ella y le pide un beso, aquel en el que hace convence a sus amigos de que pintar una valla es arte... y ocurrencias tan esperpénticas como la de acudir a su propio funeral. Nada resulta normal ni aburrido al lado de este chico inquieto.