Pura es una mujer pobre y de un pueblo extremeño.
Autodidacta y laboriosa, bella además, es seducida por el señorito de la casa donde ella trabaja. Ella emigra con su nuevo marido a París y con su hijo, el que se convertirá en un pastelero famoso. Muere Pura y la novela se desarrolla a partir del Diario que ha escrito.