Si un detective privado se ocupa de la vida privada de sus clientes, el detective íntimo se ocupa de su vida íntima, lo que lo convierte en una especie de atípico psicólogo/investigador que resuelve los más abstrusos problemas intelectuales y emocionales con la ayuda de su tía Marta, una mujer tan imaginativa como audaz. A su despacho llegan un sinfín de personajes peculiares con otras tantas peticiones sorprendentes, que van desde completar un poema de Cadalso, a desvelar el sentido oculto de una partida de ajedrez o averiguar por qué Chesterton eliminó a uno de sus personajes más logrados. Su caso más especial y complejo llevará al protagonista a sumergirse en el intenso drama familiar de Leonor, una atractiva escritora que ha «perdido» su última novela.