En Adiós amigos las cosas desaparecen para reivindicar su espacio. Una obra maestra sobre la memoria, el dolor de la pérdida y los fantasmas que no desaparecen.
Un barco que de algún modo burla su amarre y se esfuma. Un muñeco paracaidista en misión especial que se despista y cae herido entre los matojos. Un niño, Xosé, que espera a su padre pesquero mientras rumia la historia de un fantasma...
Un viaje calmo que a través de viñetas precisas, certeras, desemboca en un humilde pueblo gallego, y continúa travesía más allá de estas páginas, en la mirada del lector.
